En un parto sin ninguna complicación.
”Brisa”, una hembra de lince ibérico, dio a luz a cuatro cachorros en la mañana del pasado sábado en el Centro de Cría de el Acebuche, situado en el Parque Nacional de Doñana.
Se trata del segundo parto que tiene lugar este año. La madre, Brisa, es fruto de la primera camada nacida en cautividad, allá por el año 2005. El parto tuvo lugar entre las 6:20 y las 8:10 horas aproximadamente.
Esta especie, catalogada en peligro de extinción, respira ahora un poco más hacia su supervivencia. La población de lince de Sierra Morena ha pasado de las 19 hembras territoriales censadas en 2003 a las más de 30 actuales, con una media anual de 40 nuevos cachorros.
En Doñana, donde en 2007 apenas quedaban 50 linces a punto de extinguirse tras la pérdida de once machos por una epidemia de leucemia felina, viven ahora unos 70 ejemplares.
A pesar de todo esto, los grupos ecologistas continúan denunciando que muchas amenazas del lince ibérico, en especial la pérdida de hábitats y los atropellos, siguen activas, y suponen un obstáculo real contra el que hay que presentar soluciones eficaces si queremos que esta especie emblemática de nuestra península vuelva a reintroducirse poco a poco.